Por qué comprar un coche nacional.

Como ya os contábamos en artículos anteriores los coches de segunda mano han visto crecer sus ventas hasta convertirse en la primera opción para muchos compradores. Sin embargo, comprar un coche usado no es una tarea sencilla y es necesario estar muy atentos a numerosos aspectos antes de tomar la decisión para, de este modo, evitar sorpresas en el futuro. Siempre es mejor estar amparado por una empresa especializada, ya que probablemente se haga cargo de la reparación, asumiendo la garantía que debe ofrecer a sus clientes. Con un particular todo cambia, puesto que es más fácil que se desentienda y nos acabe ocasionando un quebradero de cabeza. Un 30% de los vehículos importados sufre una  manipulación del cuentakilómetros, de ahí que muchos concesionarios de ocasión sólo vendan vehículos nacionales. El libro de mantenimiento o la documentación de la ITV (Inspección Técnica de Vehículos), nos proporcionará los Kilómetros que presentaba el coche en cada una de las revisiones. Si detectamos algo sospechoso, como un número muy bajo de kilometraje en algún ciclo entre revisión y revisión, es mejor pedir consejo a un profesional o incluso descartar la compra. También aconsejamos solicitar el informe del vehículo a la DGT. Cuesta aproximadamente 9 euros y permite conocer detalles como si tiene algún tipo de embargo, multas pendientes o si ha pertenecido a una flota. Además, en el caso de que la marca no disponga de taller autorizado en tu ciudad, no tendrás más garantía que la que te ofrezca la importadora o el vendedor particular. Aunque muchas marcas existan en nuestro país, algunas de ellas no reconocen las garantías extranjeras. El tema de asegurar el coche es otro factor a tener en cuenta. Estas empresas saben que cualquier incidente con tu vehículo les puede significar un enorme problema, ya que probablemente sus talleres de confianza no puedan hacerse cargo de la reparación o no dispongan de las piezas necesarias. En Gesticar Bilbao todos nuestros vehículos son nacionales y con garantía propia de concesionario para que comprar un coche de ocasión resulte de una vez, una tarea sencilla.